La consejera de Derechos Sociales, Igualdad, Diversidad y Juventud del Gobierno de Canarias, Noemí Santana, visitó junto a la directora del Instituto Canario de Igualdad (ICI), Kika Fumero, el proyecto La Casita, un programa gestionado por la entidad Oblatas y dirigido a la atención de mujeres víctimas de explotación sexual. El programa presta un servicio de acogida, asesoramiento y acompañamiento adaptado a sus necesidades que en este último año, como señaló la consejera, se agravó con la crisis sociosanitaria derivada de la pandemia. “La crisis sanitaria ha puesto aún más obstáculos a que puedan desarrollar una vida normalizada y también para acudir a centros como estos que les hacen acompañamiento en su día a día para buscar otras alternativas”. Santana aseguró que el proyecto “es un referente en la lucha por la igualdad como mujeres feministas y también por la igualdad social”.
Desde 1988, Oblatas ofrece diferentes respuestas a mujeres en situación de prostitución y/o víctimas de trata de seres humanos con fines de explotación sexual.
La coordinadora del proyecto Sara Baz, resaltó la importancia del proyecto para cubrir las necesidades de las usuarias y también “visibilizar la realidad de otro grupo de mujeres que están más estigmatizadas”.
Baz describió como durante los meses de confinamiento se atendieron casi el mismo volumen de mujeres que durante el año 2019 en el que prestaron atención a 476 y expuso como la crisis económica, y ante la situación de vulnerabilidad extrema, algunas tuvieron que regresar al ejercicio de la prostitución.
Los objetivos específicos de La Casita son detectar posibles víctimas, desarrollar itinerarios de inserción socio-laboral, ofrecer un servicio de atención psicológica y atender y gestionar las demandas específicas expresadas por las mujeres.
En el marco del programa se han realizado acciones formativas, reuniones con mujeres transgénero, se ha dado apoyo psicológico individualizado y se han coordinado con otros recursos sociales.
ACFI PRESS
